LOS $300 DOLARITOS ESTATALES PARA LA CUARENTENA DEL COVID-19

1° CASO
Está el señor al que cuando le dieron los $300, creyó que se había sacado la lotería e inmediatamente empezó utilizar el dinero para darse la buen vida culinaria de la comida chatarra. Así paso como tres semanas ordenando vía teléfono de famosas cadenas de restaurantes pollo frito, pizza y cualquier comida rápida que fuera distribuida hasta su lugar de vivienda. Utilizó un poco de dinero para la comida pero como lo demás lo malgastó, a mediados del mes ya no tenía nada para continuar sobreviviendo.

2° CASO
Un padre de familia que se mantuvo en su hogar decidió comprar víveres y dejar dinero para gastos básicos del mes bien distribuidos. También utilizó el dinero para pagar alguno recibos, o sea que los 300 dólares le fueron de mucha utilidad. El problema es que al ver que la cuarentena se está extendiendo, hoy está preocupado porque ya se dio cuenta de que no le alcanzaría ese dinero para otro més, mayo.

3° CASO
Este es el caso de la típica señora que se la lleva de super inteligente, o mejor dicho que "siempre sale con la vivianada". Es de escasos recursos y vive de lavar ropa ajena y de vender productos domésticos en la calle. Confiada de que podría seguir lavando y cobrando durante la cuarentena decidió usar los $300 dolaritos, no para estar en casa y respetar la cuarentena del covid-19 sino para invertirlo en más mercadería, y así tener para salir a vender a la calle todo el día. "Más producto, más ganancia pensó". Al día siguiente de recibir el dinero se le veía jalando toda clase de paquetes en los que había hecho su inversión. Si embargo, como la situación económica se puso mala para todos, y resulta que la gente ahora tiene mucho tiempo porque están en la casa, esta doña perdió las lavadas. Para terminar de complicar, las cosas, hoy la señora se queja de que no vende porque la policía la anda "corretiando" así que siempre la terminan regresando para su casa sin importar que ande o no usando mascarilla y guantes.

     4° CASO- EL CASO COLECTIVO
Comenta la tortillera que vinieron a distribuir botellas de agua purificada a la colonia al principio de la cuarentena ya que el servicio de agua potable estaba bastante irregular o era totalmente nulo. Cuando la doña se abocó al lugar del camión que destribuía las botellas, no pudo recibir más que un pequeño paquete de media docena porque había mucho desorden causado por la turba de vecinos. Esperó y trató pero no pudo obtener nada más por ese terrible desorden. Ella dice que es injusto pues mucha gente iba con más botellas y, lo peor, según sus propias palabras, es que mucha gente terminó haciendo negocio,pues las terminaron vendiendo, o sea que algo que fue gratuito para ellos lo terminaron usando para obtener dinero. Llamémosle sobrevivencia o egoísmo de nosotros el vulgo, "Eso es lo que pasó." afirma la doña.
Y así hay más casos que serían necesario investigar para comprender la cultura y práctica vital de nosotros los salvadoreños tanto como nuestras mentalidades. No se trata de juzgar a nadie pero si de tratar de comprender el modus vivendis de muchos salvadoreños.
Si ud. conoce algún caso interesante y quiere compartirlo, pues por favor hágalo...

                                                      Carlitos Flores

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