CYBERGCRACIA

 

                Si en nuestros tiempos vivieran Platón y Aristóteles de seguro a su teoría política tendrían que adicionar esta categoría. Por cybergcracia me refiero no al poder de los usuarios de las redes sociales, se debe entender que este término hace referencia al poder de la grandes corporaciones que poseen las redes sociales y que monopolizan la internet. Este es el caso de Facebook, mejor dicho es el caso del cuino Marck Zuckerberg. Este cebón de bellota se apoya en la expresión según la cual la justicia es el poder del más fuerte y, así, comete graves fraudes con la información de sus usuarios a la vez que coarta la libertad de expresión de forma unilateral y arbitraria. Pero ni en las épocas del oscurantismo más remoto de la historia de la humanidad se actuaba de forma más troglodita, más injusta y más falaz como lo hace el cuino Zuckerberg que con el uso de falacias y pura demagogia le prohíbe la libertad de expresión a los usuarios de Facebook. Te acusa con un sofisma haciendo el papel fiscal, luego actúa como juez y te sentencia al ostracismo de las redes sociales y, finalmente, como un verdugo con el hacha de la impunidad e injusticia autoritaria, descabeza tu libertad de opinión, te calla y elimina de la palestra pública en internet a pura fuerza bruta como lo hiciera el hombre de las cavernas, peor aún como lo hiciera el homínido menos evolucionado que dio origen a la especia humana.. Así protege su poder político, su ideología y su poder económico, de paso censura toda opinión que sea crítica con el actuar injusto del imperio que ha existido en la historia de la humanidad, el imperio del norte, el imperio anglosajón.

Por otro lado Facebook viola la reglas del libre mercado al monopolizar internet y sabotear a las posibles competencias que pongan en riesgo sus intereses hegemónicos. Facebook genera millones, miles de millones de dólares en el mundo y en ningún lado paga impuestos, no retribuye nada a nadie de todo lo que obtiene de la humanidad, pero síííííí nos roba la información personal para traficarla y viola las constituciones de todos los países del mundo al violar los derechos civiles de sus usuarios. Este mes que Facebook me sometió al ostracismo, lo invertí en mejores que haceres que me resultaron mucho más útiles que cuando reviso el muro de esta red social y lo único que encuentro es censura, violencia, fake news y manipulación psicológica de las masas. Gracias Facebook por haber me callado por un mes y si lo vuelve hacer por este comunicado, entonces diré, "doblemente gracias." Leí tres libros este mes que estuve apartado de esta red social y descubrí otras que no son conocidas pero que tampoco son totalitarias como sí los es Facebook.