La Opresión del Tenedor

Finger-feeders, that is what I am! La gente me discrimina, me ve mal por eso pero es lo que está en mis genes culturales...

...y es extraño porque los finger-feeders superamos a los forkfeeders en una proporción de dos a uno. Los finger-feeders habitamos las regiones o mejor dicho los continentes más poblados del mundo, así es fácil para todos encontrarnos en África, el medio oriente, la India, América Latina y en África. Entonces ¿por qué se nos discrimina y se nos excluye de la sociedad, cómo es posible que la tecnología de alimentación sea un parámetro para oprimir a los distintos pueblos del mundo?

    Principalmente el mundo está dividido en forkfeeders, chopstick-feeders, y nosotros los finger-feeders. Notablemente somos las mayorías en el mundo, pero bueno las élites nunca son ni nunca han sido las mayorías y las mayorías siempre hemos sido vilipendiadas, explotadas y oprimidas, ¡parece que tiene sentido! 

    En un colegio de "caché" me despidieron porque todo mundo inmediatamente notó que yo era un finger-feeder, eso es algo intolerable en un profesor y en especial si es el profesor de inglés -el profe de un idioma de chaché-, el mundo occidental y su periferia no puede permitirlo.

    Se puede ser finger-feeder principalmente por dos razones: por pobreza y por herencia cultural. Mi caso es el segundo, así que si Ud. me pone una spoon, un fork y un muy elegante knife en la meza, no crea que me molestaré en utilizarlos. Mi naturaleza son mis garras, perdón, perdón quise decir mi naturaleza es ser un finger-feeder. No va con la sutiliza de mi personalidad, aunque sí es parte de la sutiliza de la urbanidad y las buenas maneras del mundo burgués occidental, sin lugar a dudas.

     En todo caso son normas que tienen dos principios como ejes principales: establecer el carácter de vida burgués como único, refinado y agradable, a la vez que le da un aire de majestuosidad para conformar, de esa manera, una autentica apología a su poder social, económico, cultural y político; luego, está el aspecto de la hegemonía cultural, es la obligación de los demás dejarnos controlar, dejarnos obligar a vivir nuestras vidas en el mundo de la buena urbanidad y control social, en el mundo del perro domesticado pues. 

    
    La sociedad salvadoreña es estúpidamente controladora, así que te adaptas y sigues sus reglas o eres excluido y marginado por el mero sentido de la apariencia del buen gusto y la "buena educación" que siempre ha buscado moldear la personalidad de las personas, de manera que se les pueda gestionar como lo hace un burgués con sus empresas, o sea en la medida de sus propios intereses materiales y horriblemente hasta de su narcisismo personal.

    
     Ahora sí que tengo un mejor argumento para ser un finger-feeder, la rebeldía y la necesidad de mandar a comer mierda a esa sociedad con tendencia a homogeneizar a todo mundo sin importar que en el proceso de imponer su hegemonía cultural tenga que pasar por encima de la dignidad y derechos humanos de los distintos pueblos, pero como Uds. saben, el lema es !Llevar la civilización al mundo barbárico, y sobre todo: imponerla!! 

    ¡No me creen! pregúntenle a ese pingüino que en El Salvador tienen de presidente, a Bukele, el payaso burgués por antonomasia.

Carlos Alfredo Flores