Diario vivir, intolerancia y violencia en la sociedad salvadoreña

 Los salvadoreños somos explosivos. Iba a tomar el microbus y en el punto estaban hablando que la ambulancia...

...se había llevado al dueño de una coster macheteado. Entre los motoristas que para variar no dejan de ser pendencieros, violentos y unos grandes vulgares, decían, ellos mismos, que llegó el propietario ofendiendo muy vulgarmente a un motorista microbusero y dando le ordenes con ofensas que no bajaban de pendejo e hijo de puta. En ese momento, los otros microbuseros, se empezaron a burlar del motorista gritándole que "....había venia su tata que lo iba a poner en su lugar". La cuestión está en que el propietario humilló y arrolló la dignidad del motorista enfrente de los pasajeros, los motoristas y todo mundo. Así que dicen que el motorista fue al microbus y cuando bajo, le dio un corbazo por la espalda al dueño del microbus -y como todos sabemos un buen motorista salvadoreño, no se baja su corbo del carro.


 Es algo interesante porque, aunque sean vulgares y todo lo demás, esta gente -los microbuseros y buseros- tienen a su familia y trabajan como catorce horas diarias para ayudarlas y sacarlas adelante. Pero pierden fácilmente los estribos y en ese momento explotan y les vale chonga todo lo demás. Por esta experiencia y otras, yo mejor trato de no ser peleonero, pues uno no sabe que locos se pueden encontrar en el sistema de transporte. Si me empujan o algo, mejor me hago el loco, así uno evita meterse en problemas con salvadoreños explosivos que inconscientemente en el momento más inquieto sacan toda su violencia contra los demás. 


En el SITRAMSS también vi la misma situación: dos mujeres que parecían muy tranquilas y que ya eran señoras maduras, se empezaron a pelear por no tener paciencia en la cola y, de repente, hasta los paraguas se estaban rompiendo en las cabeza. También, pensemos en ese juez de lo civil -Luis Edgardo Molina, ver la cita al final- que quería arreglar con una familia -pactar jurídicamente- a la que en un momento de locura, les apuñaleo a la mascota y la dejó tirada adentro del edificio donde vivían; allí quedo el perrito desangrado y tirado en el piso -un acto de cobardía y totalmente macabro. !Y estos jueces psicópatas son los que supuestamente van arreglar los problemas de la sociedad y van a llegar en términos de materia legal a la solución justa de los conflictos civiles.

 Habría que llevar un registro de toda la intolerancia que a diario ocurre, por lo menos en SS, para estudiar mejor este fenómeno. La represión del Estado, la explotación de los empresarios a la clase proletaria y un sistema jurídico de facto que mercantiliza la justicia, son algunas de las causas en las que se pueden pensar.

C.A.F.


CITA

Magistrado de CSJ renuncia a su cargo tras denuncia por maltrato animal - La Prensa Gráfica (laprensagrafica.com)

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